Ahora les voy a contar un cuento acerca de un hombre que vivió hace muchos años. El tenía dos hijos que un día, cuando iban caminando por el bosque, uno de ellos se convirtió en el que es la lluvia. Después bajo a la tierra e hizo que lloviera. El otro, el menor, regreso más temprano a su casa. Alii su viejo padre se enojo con él y le dijo
―¿Por qué dejaste a tu hermano -dijo el viejito.
Por eso se escondió a la mitad del camino y se puso a esperar a su hermano. Salió cuando su hermano paso y lo fue siguiendo basta que llegaron al bosque. El iba a la casa del que es la lluvia, donde iba a hacer que lloviera. En el camino había dos limones y se los llevo. Entro en el bosque y luego le pego a una peña que estaba allí, y la casa en la peña se abrió. Entonces el otro también le pego a la peña, y otra vez se abrió y entro y siguió a su hermano. El que no se convirtió en el que es la lluvia era una persona común y corriente. Andaba siguiendo al otro espiándolo. Entonces el otro se volteo y vio que le estaba siguiendo y le dijo:
― ¿A que vienes también tu, hombre? ―le dijo. Y el otro dijo:
―Vámonos, pues nuestro padre está enojado porque te deje, y me dijo que te puede pasar algo en el camino cuando regreses en la noche.
―Bueno, vamos; pero ten cuidado, no vayas a echar a perder el trabajo a donde vamos, porque esta es la casa del que es la lluvia. Yo me voy caminando y tú me sigues de cerca. Cualquier mandado que te dé el viejito que es la lluvia, hazlo. Si quieres comer un plátano, dile a la mata que deje caer ―solo uno. Solo un plátano maduro para que comas; no vayas a hablar de muchos porque si pides muchos, caerán muchos. Por esa razón, pide solo uno para comer. Ten cuidado de no destruir nada -le dijo su hermano, porque él no podía hacer nada bien por sí mismo. Pero el era de carácter fuerte, y dijo a los plátanos:
―Que caigan tres o cuatro porque me los voy a comer. Entonces cayeron muchos plátanos que el había causado que cayeran. El viejito que es la lluvia le mando que cociera frijoles para que comieran cuando regresaran de dar vuelta a la tierra haciendo que lloviera. Ellos iban a llegar a comer, dijo el viejito que es la lluvia. Luego le dio solo siete frijoles, y puso la tinaja en el fuego y los frijoles en la tinaja. Se iban a poner en siete ollas para cocerlos alii, pues era la casa del que es la lluvia. Se debía poner un frijol en cada olla. Pero el no creyó que solo un frijol fuera suficiente, "porque vamos a querer comer mucho", pensó. Y tomo una jícara de frijoles y los echo en las ollas. Alli es donde echo a perder el trabajo, porque los frijoles en las ollas se esponjaron y así quebró las ollas; quebró las siete ollas llenas. Como no encontró donde ponerlas, abrió las tinajas donde estaban las nubes del que es la lluvia. Y los diferentes tipos de lluvia se escaparon y cayeron: la lluvia con viento, la llovizna, el aguacero; hay muchas clases de lluvia, y así son sus nubes. Y el abrió todas, hasta la última.
Así el viejito que es la lluvia supo que se había echado a perder el trabajo alii en su casa, y trono. El pobre que se había convertido en lluvia regreso muy rápido de hacer caer la lluvia en la tierra. Cuando llego lo regañaron: ¿Por que había invitado a su hermano para ir con él? Y ahora el había destruido su casa. Así le dijo el viejito que es la lluvia al que se había convertido en la lluvia. Este empezó a llorar, y su trabajo le fue quitado. Regreso a la tierra a donde estaba su casa. Lloro mucho porque le habían quitado su trabajo, y tenía miedo por lo que le había pasado. El tenia una hermana que podía convertirse en rana, y hablo con ella acerca de como su hermano había echado a perder su trabajo:
―El fue y echo a perder el trabajo en la casa del que es la lluvia -le dijo a su hermana, y ella dijo:
―No tengas miedo. Yo sé cómo es eso. Ahora afila siete palos; vamos a esperar para agarrar al que es la lluvia. El no es la gran cosa; yo también puedo hacer algunas cosas. Dijo eso porque podía convertirse en rana.
Entonces el saco punta a los palos, y llego la hora para que bajara el que es la lluvia. Venia bajando para agarrarlo, pero la mujer gano porque él se clavo en las puntas afiladas de los palos. Entonces el que es la lluvia le rogo mucho diciéndole como el trabajo ―en su casa se había echado a perder. Estaba sufriendo, y luego le dijo:
―Si me sacas estos palos, te devolveré tu trabajo ―le dijo el que es la lluvia. El estaba muy contento y le saco los palos. Y si volvió a recibir su trabajo. Empezó a transformarse y se convirtió en el que es la lluvia. Después fue como viento y destruyo las milpas de la gente. Luego fue a donde estaba la milpa de un hombre pobre que la estaba cuidando. Estaba dentro de su casa. Llovió y soplo mucho viento. La casa del hombre fue arrancada por el viento. El estaba divirtiéndose y solo quedaron los palos de la casa. El hombre estaba allí aferrándose a los horcones de su casa y cortando furiosamente el viento con un machete. Así el hombre corto el estomago al que es el viento cuando pasaba por ahí. AI cortar le pego justamente en medio al que es el viento. Así llego a su fin; murió allí donde estaba destruyendo la milpa.
Así termina el cuento.